sábado, 30 de mayo de 2015

La madre navegando entre pinceladas



Cada madre es una obra del universo
como huella única e imperecedera
una escultura tallada para todos los tiempos
por una línea continua que se hace mixta
creando yuxtaposición de múltiples formas
ovillándose para configurar volúmenes que
llena de masas de colores como luces y
desovillándose expresa en tonalidades la
multiplicidad de la escala de sus sentimientos
y con rápidos trazos suelta su espíritu para
que emprenda aventuras de alta navegación
y todo es integrado por la fuerza necesidad
en la totalidad del lienzo que lo hace vivir
mutándose en la geometría del amor que
es parte esencial de la geometría de la vida
y todo es construido con amor universal
por el vasto movimiento del átomo
el gigante pincel del universo



En el Universo todo es
atracción y reacción
fecundación y gestación
 que ocurren como necesidad
universal para crear la vida
una necesaria totalidad universal
donde la mujer se hace madre
el hombre se hace padre
y el niño se hace hijo
el hombre integral como
el gran arquitecto
de la naturaleza humana y
de la naturaleza no humana

Y esta necesidad
funciona en amor
en libertad, en justicia
bajo verdad, en solidaridad
en plenitud de belleza
  
Y es el asombroso mecanismo del universo
operando bajo sus leyes universales
¿qué acontecer escapa a esta necesidad cósmica?
como hecho natural ¡nada! ¡absolutamente nada!
ni el mismo conjunto del universo
y es su gran cotidianidad universal
como la velocidad lo es de la luz
pero ¿Y nuestro accionar cotidiano es parte
de esta cotidianidad natural y universal?
Empezó siéndolo como el hijo lo es de la madre
pero luego escisión en el corazón del universo
la violencia social que no es parte ni menos deriva
de esta constante necesidad única
más bien su acción se propone destruirla
negarla como la existencia universal
pero ¿cómo llega a ocurrir tan dimensional
acontecer histórico?
la cisura parte del comportamiento del hombre
 
Adán arrepentido/Florentino Trapero/Segovia
Entonces hay dos existencias dos vidas
una propia dentro de la totalidad natural
otra fuera como su antagónico opuesto
lucha de vida o muerte entre ambas
y es la más antigua de las luchas
una para preservar la vida
la otra para destruirla y
no hay nada que hagamos
que no esté en una u otra
es la más grande división social
que la historia del hombre conoce
la cual es hasta hoy su entera obra
¿dos poemas? ¿dos artes? No! nunca!
sólo uno existe solo el verdadero
el poema de la vida o el arte de la vida
pero aún en lucha tenaz para fundar su reino

Y en esta titánica lucha universal
¿cuál madre? aquella que
mejor responde a la necesidad honda
de fecundar, gestar, amar como modo de vivir
hecha de la substancia de ese amor universal
la madre perenne que solo existe
para regar ese amor en todo el orbe natural
para sembrar ese amor en los hijos de los hijos
eslabones para la fundación de la vida humana
y así lo dejamos expuesto en el espacio

Mayo de flores la primavera en tierra tropical
que a la vez de avivar el movimiento de la vida
también en mi aviva la presencia de mi madre
y su hacer de madre en la artesanía de fogón
como la consagración de su amor a los suyos
antes y después de aquél 31 de mayo de 1999


Y ella tiene sus ramas diversas
madres de madres con frutos de ese amor
partes de aquél gran poema o arte de la vida
como la alquimista que de ella desciende
con el pigmento del color
en las puntas de sus dedos
como pinceles para irrumpir
en la armonía blanca del lienzo
y mutarlo en armonía de mixtilíneas
de multicolor y multiformes
cargadas de volúmenes para que
nos cuenten la aventura de la vida
tomada de la vertiente del gran poema o
arte como capítulos de la universal lucha



Y es un hacer de quien prodiga amor
ya contenido en el cóncavo lienzo vientre
que lo transmuta al aljibe de sus hijos para
que nos narren las peripecias de su vivir
como contarnos la vida misma para que
no dejemos de perpetuarla en la existencia




Pero ¿qué nos dicen sus formas,
sus sugerentes líneas que crean
volúmenes de masas de colores?
¿qué algo abrazan sus líneas mixtas
como madre abrazando a sus hijos?
¿un algo vivo sugerente que nos grita?
Pues bien, y con permiso del arte,
aún a riesgos de equívocos
estos cuadros o bocetos son
una ofrenda de amor
el amor abrazando al amor
como único lenguaje universal
entre los hombres hermanándolos
y a la vez clamor o grito diciéndonos
que aún en este tiempo de sombras
existe el amor buscando a su destinatario
porque es esa luz en la punta de sus pinceles
buscando al lienzo para plasmarle ese algo vivo
la plasticidad del amor yendo a buscar al hombre
porque en este tiempo ambos andan en exilios
y dónde va este hombre va el amor en pos suyo
luchando para rescatarlo, liberarlo, devolverle
su condición humana para que se haga humano
y otra vez la fecundación, la gestación de la
vida que los hijos siempre quieren contarnos





Pero en verdad ¿dejamos que nos las cuenten?
Y también digo como dijo el poeta León Felipe
vivimos en el tiempo del llanto
y la lágrima es nuestra arma de lucha
en este antiguo combate por la vida
pero ¿es esto lo que nos quieren contar?
porque el amor, sin querer o queriéndolo,
está teñido de ese llanto
humedecido por esa lágrima
aunque sostenido por el andamiaje de la alegría
entonces, el amor es también nuestra arma de lucha
en este tiempo de combate tenaz y feroz por la vida
y los dedos o pinceles con su luz o color en sus puntas
tiemblan conmovidos cuando trazan sus líneas al lienzo
porque es el amor untado de esa lágrima en temblor
que lo hace grito amor herido proclamando la vida que
se prolonga en los niños que nacen para hacerse hijos
con la herencia que trasmuta la madre de fundar la vida
y es eso precisamente lo que nos quieren contar los hijos


Y es como el sol irradiando a la tierra
 para alimentar su vida y en paralelo
la madre amamantando a sus hijos
como copiosa lluvia de pinceladas
que testimonian a que vino su amor
 entonces, es fecundar, amar, gestar
la vida solo para que sea vivida
en medio de odas de tristezas pero
para trocarse en odas de alegrías
que expresan aquella vieja lucha




Y las madres aun con sus propios hijos
a la vez de testimoniarnos que están
en esta existencia para sembrar vidas
con ellos mismos nos recuerdan
que estamos en este tiempo para
extinguir la dureza de esta vida
para que brote el puro vivir libre
fluyendo pociones del amor universal
entonces, tenemos que fecundar, gestar
trabajar con creación y amar todo lo bello
para tallar otro tiempo de vida porvenir
y después de tallado este tiempo de vida
seguir fecundando, continuar gestando
vivir amando y ser amado
para llenar nuestro espacio-tiempo
de la verdad, de la belleza, del amor
de la libertad y de  la justicia
entonces, vivir como la flor, el fruto,
el árbol, el pájaro, el cocuyo, el niño


Y precisamente para alcanzar y fundar ese vivir
 terco, insistente el gran poema o arte de la vida
no cesa en buscar vías para proclamar su propuesta
en cada pincelada que se trace sobre el vientolienzo
en cada sonreír o mirada lejana oteando el porvenir o
en el leve forcejeo de la melancolía para no ser tristeza
o en bocetos para quien quiera expresar su libre sentir
o en el niño que pese a la conspiración del tiempo
siempre estará allí en el interior del hombre
porque la vida obstinada no quiere dejar su sitio
como la oruga que se muta en crisálida para
su sueño de vida que la hace mariposa


Y todo es madre y ¡siempre madre!
la misma fecundación y gestación
aun cuando se transita este tiempo de sombras
la tenaz lucha de la alianza madre e hijos para
persistir en el ascenso de la arquitectura de la vida
aun cuando se quiebren ángulos dentro de triángulos
pero ese espacio-tiempo entre estas cuatro madres
que ellas mismas con sus historias nos han construido
es la hermosa rendija haz de luz donde acampamos
y si en verdad en ella amamos podemos vivir
prolongándolo en los hijos de los hijos para
que trepen con firmeza la pirámide de obstáculos

Todo esto lo leemos entre líneas en estas pinceladas
que creo que aventuran visionar otro tiempo de vida
pero ¿cuál tiempo? ese tiempo contenido en sus líneas
sus colores, en sus formas y en el océano de su amor
pero ¿hasta cuándo esperar, cómo conocerlo?
y aventuro afirmar que está en su código que el
hombre debe descifrar para llegar a conocer
su verdadero tiempo de vida y a sí mismo


Y que el hombre desde su nacimiento en el cosmos lo
ha venido dejando en su camino en trazos de volúmenes
y algunos regados en el interior de antiguas pirámides y
 que ahora toca recogerlos y juntarlos en una gran obra
la cual es él mismo como el humano hombre creador
pero ¿qué hacer, cuándo, dónde, cómo, por qué?
gritos, preguntas que son los signos de este código




Qué hable el otro, tiene la palabra
aquél poema o el arte por la vida
que es el hombre humano mismo
que cada quién lleva por dentro
como la oruga en su metamorfosis
para que decida el desenlace final
de la vieja lucha y proclame la vida
como esta oruga lo hace en mariposa

No hay comentarios:

Publicar un comentario