Cada madre es una obra
del universo
como huella única e
imperecedera
una escultura tallada
para todos los tiempos
por una línea
continua que se hace mixta
creando yuxtaposición
de múltiples formas
ovillándose para
configurar volúmenes que
llena de masas de
colores como luces y
desovillándose expresa
en tonalidades la
multiplicidad de la
escala de sus sentimientos
y con rápidos trazos
suelta su espíritu para
que emprenda
aventuras de alta navegación
y todo es integrado
por la fuerza necesidad
en la totalidad del
lienzo que lo hace vivir
mutándose en la
geometría del amor que
es parte esencial
de la geometría de la vida
y todo es construido
con amor universal
por el vasto movimiento
del átomo
el gigante pincel del
universo